La vida transcurre y a medida que pasa el tiempo los años se acumulan.
Me despierto a los 40 años sintiendo que apenas fue ayer cuando estaba jugando en el patio de mi casa de las Américas con mi hermanita y mis primos, apenas fue ayer cuando jugaba “burra tamalera” en el patio de la secundaria con mis entrañables amigos Panchower, Pirruris, Hugo, Arturo, Parra etc., tiene una semana que estaba caminado con mi casco y mis hombreras para llegar temprano al campo de entrenamiento de los zorros y poder disfrutar con mis amigos y hermanos la preparación previa a enfrentarnos a los bucaneros, apenas hace unos meses cuando subí las escaleras de mi casa y con un beso me despedí de mi madre para comenzar la aventura de ser un estudiante de intercambio al terminar la prepa, recuerdo que apenas fue hace unos meses cuando me case con mi hermosa esposa y recuerdo como si fuera ayer, escuchar a dos duendes corriendo y bailando en un pequeño apartamento pronunciando sus primeras palabras y dando sus primeros pasos….. La realidad no es así. La realidad es que tengo muchos recuerdos producto de acumular 40 años de vida.
Ahora estoy seguro que Dios ha estado presente en estos 40 años de mi vida, primero sintiéndolo distante y ajeno y ahora sintiendo que esta cerca de mi.
Lo digo con sinceridad, diariamente le pido a Dios para que me de sabiduría, fuerza y paciencia, porque he aprendido que ser padre, esposo, amigo, trabajador no es tarea fácil. Son tantas mis imperfecciones y mis fallas, son tantas las cosas que me duelen ver de mi y del mundo en general, que me reconforta refugiarme en su paz, en su amor y en sus promesas para que mi vida y la de los que tengo cerca tenga un sentido y pueda a través de El, transformar esa preocupación en alegría y gozo.
Hace unas semanas estuve insistiendo en mis charlas con la Claus acerca de la diferencia que venimos o no hacer en este mundo.
Cual es la trascendencia de lo que hacemos hoy, si la vida es tan efímera?
De qué me sirve buscar el “éxito” si al hacerlo olvido el corto tiempo que hemos venido a estar en este mundo. Trabajar para tener una casa grande, auto nuevo, construir un nuevo negocio, trabajar para ayudar a los niños sin padres, incluso tratar de brindarles a los hijos lo “mejor” etc. Son acaso esas las cosas donde mi atención y tiempo deben ser invertidos?
Me alegra ver a las personas que viven la vida de forma simple, tomando cada día como una oportunidad más de simplemente existir y hacer lo que debe uno de hacer…. Vivir. Sin embargo mi naturaleza no es así y he aprendido a aceptarme así, complejo, como un maestro solía decirme Ray no se te puede quitar lo barroco. Esto no se escuchaba como un cumplido sino como un reproche a esa forma de ser mía que en ocasiones se percibe rebuscada y compleja.
En fin si creen que esto que escribo tendrá como resultado una conclusión contundente y feliz, o una respuesta clara al propósito de la vida; permítanme disculparme pero no es así, sigo lleno de dudas y preguntas, sin embargo hay algunas ideas, reflexiones e historias que me gustaría compartir con ustedes.
Hace poco murió una persona cercana a nosotros, fue muy impactante ir a la misa que hicieron en su memoria, y ver a una multitud de personas reunidas alrededor del dolor de haber perdido a una persona tan querida.
Algo que me marco fue escuchar el testimonio de las personas que tuvimos la fortuna de convivir con ella y escuchar la forma en la que las personas de alrededor percibíamos lo intencional y al mismo tiempo natural forma que tenía nuestra amiga de hacer sentir especial a las personas con las que interactuaba. Sin importar si eran dos minutos, media o una hora nuestra amiga hacia énfasis no en que la hicieran sentir especial a ella sino en ella hacer sentir especial a los demás.
De qué se trata la vida?, que es lo verdaderamente importante?, que he aprendido durante estos 40 añotes?
Es obvio que mi mente me obliga a buscar las respuestas a estas preguntas, mismas que me he atrevido a contestar de forma individual; y quizá esas respuestas reflejan la forma en la que convivo e interactuo con las personas que tengo a mi alrededor. Esperaría Y desearía que conforme siga transcurriendo el tiempo, pueda con la ayuda de Dios poder cada día alinear esas respuestas a las conductas que las personas son capases de percibir en mi.
Hay una carta que escribe Pablo (el apóstol) donde me llama la atención el cuidado que pone en listar a cada una de las personas que lo recibieron y convivieron por el durante cierto tiempo.
Desde que escuche la carta y la historia, me hice el propósito de pensar en cada uno de mis amigos, familiares y hermanos como eso, personas de un incalculable valor en mi vida, personas a quienes me importa hacer sentir especial por el valor que Dios a depositado en uds (crean o no en Dios), aún a pesar de la distancia y localización geográfica.
Escucho y veo innumerables quejas acerca de la tecnología, el face, email, etc., yo les soy sincero, doy gracias que a través de la tecnología haya podido recuperar a muchos amigos, hermanos que de no ser por esta tecnología no tendría el gusto de saludar y seguir en contacto.
A partir de las historias y reflexiones anteriores y obviamente de lo que Dios me ha revelado a través de su propia historia, me atrevo a decir que me importa poder seguir conectando, escuchando, escribiendo, etc, a las personas que estuvieron, están y estarán presentes en mi vida.
Con la conclusión anterior no quisiera generar expectativas, acerca de mi conducta, conforme más grande me vuelvo, mayor es la lucha interna por convivir e interactuar con las personas. Tengo miedos y dudas de enfrentar a grupos o individuos, familiares y amigos y no tengo respuestas claras acerca de este fenómeno que por cierto escucho común en la vida de muchos adultos, vencer estos temores representa una lucha constante; Aún cuando muchos aseguran ver lo opuesto en mi.
Dicho toooodo lo anterior me gustaría como siempre rendir este escrito como un tributo a mis amigos, compañeros y familiares que han formado parte de mi vida. Así cómo la carta que cite de Pablo, créanme que cada uno de sus nombres representa algo único, entrañable y significativo en el recuento de los 40 años que tengo de vida.
Ahora ya saben que es mi deseo y oración que Dios me de la fuerza y la capacidad de sobreponerme a mis miedos e inseguridades y que sea a través de su espíritu que me permita hacerlos sentir especiales cada que Dios me de la oportunidad de escuchar, saber o interactuar con ustedes. Deseo que cada que logre hacerlos sentir especiales, sea el reflejo de El el que puedan ver y sentir cerca de ustedes.
Les prometo que no dejo de pensar en ustedes, y aunque tengo una memoria terrible siempre hago el esfuerzo de asociar sus nombres con ese momento, esa anécdota esa historia que pudimos escribir juntos y que me permite verlos como personas sumamente valiosas e importantes en mi vida.
Les mando un gran abrazo a aquellos que tuvieron el noble gesto de escribirme una notita, en verdad lo aprecio en el alma.
A los que olvidaron o simplemente no tuvieron el deseo, les pido que no se preocupen. Los entiendo perfectamente.
Un abrazo y los quiero mucho !!
Carlos Ray Ruiz
Col 3:17